¿Fin del confilcto?

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La crisis del carbón generada por un Gobierno que se cree ungido por el Cid campeador ha supuesto dos meses de huelga en el sector minero de España, y esas consecuencias se han sentido especialmente en las Cuencas Mineras de León. Ello ha supuesto la paralización el ferrocarril de Villablino durante dos largos meses que han supuesto una degradación importante para la infraestructura, especialmente por la invasión de la misma por especies vegetales.

En la mañana de ayer el ferrocarril retomó el trabajo, como el resto del sector minero, y una locomotora hizo las labores de exploración de la línea. Esperemos que la normalidad vuelva poco a poco a las cuencas, al carbón y al ferrocarril. Pero la cerrazón del Desgobierno que sufrimos puede resultarnos muy cara, no se puede abandonar a su suerte a comarcas enteras que viven de un único monocultivo y en las que imperan ciertas telas mafiosas que obstruyen cualquier proceso de regeneración productiva.

La minería española, y especialmente la leonesa, debe ser potenciada y protegida porque es junto a las renovables el único recurso energético del que disponemos, y para ello debe ser nacionalizada ya que si un sector necesita de financiación pública durante un tiempo, las mejores manos en las que pueda estar el sector son las públicas; pero mucho nos tememos que este gobierno sordo dejará hundir el carbón para que sus socios privados hagan un buen negocio importando carbón sacado por niños en Colombia o metiéndonos con calzador su adorada y para nosotros inhumana energía nuclear. Y la Junta que nos gestiona como si fuéramos una colonia, ya directamente pasa de invertir en estas tierras, no hay fondos MINER no hay nada, tiene una desidia total respecto al aprovechamiento de este camino de hierro para aportar un poco de esperanza al futuro del Valle del Sil, que se está muriendo a pasos acelerados con su silencio cómplice cuando no militante.

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